El día 6 de Octubre, se cumplieron 25 años del primer trasplante de células madre de sangre de cordón umbilical. Fue en París, en 1989, dónde la doctora Eliane Gluckman realizó el primer trasplante a un niño de 8 años con Anemia de Fanconi, empleando sangre de cordón umbilical de una hermana compatible. Este niño, tras 25 años, se encuentra en perfecto estado.

Desde entonces ya se han realizado más de 30.000 trasplantes en todo el mundo para tratar enfermedades como leucemias agudas, linfomas, cáncer en médula ósea, diabetes tipo1, esclrerosis múltiple, parálisis cerebral… El potencial de las células madre de cordón umbilical es evidente en enfermedades autoinmunes y en medicina regenerativa.

Las células madre son aquellas a partir de las cuales se forma un ser humano. Hacen posible que, a partir de un óvulo fecundado, se desarrolle un bebé. Su poder es tal, que pueden dividirse en más células madre y además en células diferenciadas: Células sanguíneas, células de la piel, células del tejido nervioso, etc. A mayor juventud celular, mayor es su potencial para dar lugar a diferentes células, capaces de regenerar tejidos dañados. Y el cordón umbilical es una excelente fuente de células madre muy jóvenes.

Las propiedades inherentes a la sangre de cordón umbilical (su inmadurez inmunológica, su extensa capacidad de proliferación y su disponibilidad inmediata), la convierten en una de las fuentes de células madre más deseables en el uso clínico.

En Secuvita nos enorgullece decir que más de 17.000 familias, han confiado en nosotros (más de 92.000 en todo nuestro Grupo) para criopreservar la sangre de cordón umbilical de sus hijos. En 16 años todas nuestras unidades han sido liberadas con gran éxito y aceptadas para tratamiento. Hemos proporcionado sangre para 1 de cada 2 trasplantes realizados en Europa con sangre conservada en bancos privados.