El embarazo es un momento muy bonito y único en la vida de los padres y del propio bebé. Durante los nueve meses que los papás pasan esperando la llegada del ansiado nuevo miembro de la familia comienzan a hacer planes: preparar la habitación del bebé, comprar ropita, la sillita de paseo, todo ello sin olvidar una de las cosas más importantes: elegir el nombre de nuestro futuro hijo o hija.

El nombre de una persona forma parte de lo que cada uno somos, nos otorga una identidad que nos acompañará el resto de nuestra vida y definirá quién somos, no solo ante nuestra familia, sino ante el mundo entero.

Es por esto que elegir un nombre adecuado suele llevar a los futuros papás a un gran dilema.

Hoy os traemos algunos de los puntos que se tienen más en cuenta a la hora de ponerle nombre a nuestro pequeño.

Sigue la tradición

Cada vez se siguen menos las tradiciones en las que los hijos se llaman igual que los padres o en las que se continúa con un mismo nombre en cada generación, sin embargo hay muchas familias que aún lo siguen teniendo muy en cuenta a la hora de elegir un nombre.

Las críticas

Cuando elegimos el nombre de nuestro futuro bebé lo compartimos con nuestros seres más queridos y amigos cercanos, esto suele provocar que cada uno de su opinión y no todas nos gusten. De esta forma puede que un nombre que, en un principio, nos encantaba nos deje de gustar tanto. La opinión de los demás es importante, pero la que cuenta es la de los futuros papás.

Nombres prohibidos

Lo primero que solemos hacer al elegir un nombre es descartar aquellos que, bajo ningún concepto, estamos dispuestos a ponerle a nuestro bebé. Es un buen comienzo ya que esto acotará más nuestra búsqueda.

¡Al ladrón!

Muchas veces nos encontramos con que varias amigas del mismo grupo se quedan embarazadas en un periodo de tiempo corto y con las que compartís las mejores posturas para descansar, la ropa más cómoda….pero también el nombre de vuestros futuros hijos. De esta forma muchas mamás y papás decidís cambiar de idea cuando os enteráis de que alguien de vuestro círculo ya lo ha elegido para su bebé.

Nos gusta lo distinto

Otra de las consideraciones que tenemos en cuenta al buscar un nombre es que no sea común. No nos suele gustar que nuestro pequeño se llame igual que cuatro compañeritos de clase, por ello recurrimos a Internet y a nombres con significado propio, de origen celta, latino o mitológico, entre otros.

En ocasiones, el momento de elegir el nombre de nuestro futuro bebé nos ocasiona estrés e incertidumbre, sin embargo debemos tomar este momento como algo bonito y único y elegir el nombre que más guste a los papás, al fin y al fin y al cabo es una cuestión de gustos.

Si estás embarazada y quieres conservar las células madre de tu bebé ponte en contacto con nosotros. Nuestro equipo de expertos estará encantado de atenderte.