Aun sin conocer a tu bebé, ya sabes que le quieres y que le vas a querer siempre. Lo sabes desde el primer momento, por esta razón buscas lo mejor para él y durante el embarazo tomarás suplementos de ácido fólico y de yodo para protegerle, siguiendo las recomendaciones de tu ginecóloga o ginecólogo.

Ese sentimiento perdurará a lo largo de toda la vida y constantemente te plantearás qué más puedes hacer para protegerle.

Conservar sus células madre

Cada vez más, muchos padres toman la decisión de proteger el futuro de su bebé conservando la sangre de su cordón umbilical, rica en células madre. Esa sangre pertenece al bebé y la compatibilidad será completa, pues se trata de células con su misma información genética. Podrán ser utilizadas en un futuro con todas las garantías, siempre y cuando el proceso de criopreservación sea riguroso. Solamente en ese caso, la muestra almacenada estará dotada de propiedades para tratar algunas enfermedades.

Informaos y estudiad las opciones

Para ello lo mejor es contactar con empresas de criopreservación de sangre de cordón umbilical, que os informarán de todo el proceso, las condiciones y garantías. Estudiad todas las opciones con calma y en detalle, ya que aunque parecen todas similares, existen diferencias en cuanto a la calidad y la seguridad que ofrecen.

Tened en cuenta únicamente aquellas empresas que posean una acreditación específica. La acreditación GMP (Good Manufacturing Practices) es la exigida a los laboratorios farmacéuticos y la única que establece que la unidad de sangre de cordón umbilical se certifica como medicamento.

Tendréis que rellenar una serie de formularios médicos. Estos a su vez serán revisados por un hematólogo que será quien, en última instancia, descartará que haya factores excluyentes o limitantes que desaconsejen la extracción.

También deberéis firmar un contrato con vuestros derechos y obligaciones.

El día del parto

Al contratar el servicio, recibiréis en vuestro domicilio un kit con todos los elementos para realizar la extracción y que deberéis llevar a la maternidad el día del parto.

Hay empresas, para las que la calidad y la seguridad son la base indiscutible de todo el proceso, por eso van personalmente a recoger la muestra de sangre al Hospital, una vez realizada la extracción. Acude un técnico de la compañía, debidamente formado y conocedor de todos los protocolos. Esta es la única manera de comprobar que todo se ha realizado correctamente y que la muestra viaja adecuadamente acondicionada para que llegue en perfecto estado.

El servicio en estos casos es algo más caro, pero merece la pena por la confianza y la tranquilidad que aporta.

Hablad con vuestro ginecólogo

Es importante que, previamente a la contratación, habléis con vuestra/o ginecóloga/o y os aseguréis de que realizará la extracción. No se realiza en todas las maternidades de nuestro país y, para evitar sorpresas, es conveniente plantearlo con antelación.

Además, es probable que vuestro médico pueda incluso asesoraros sobre la conveniencia de conservar las células madre, o sobre la seriedad de las distintas empresas que se dedican a ello.

La recomendación general es iniciar el proceso al menos dos meses antes.

La decisión está en vuestras manos

Conservar las células madre de los recién nacidos es una práctica cada vez más extendida y que se realiza en más de 60 países.

En nuestro país, se autoriza su conservación pero, si se guarda dentro de nuestras fronteras, hay que firmar un documento por el cual se autoriza al sistema público a utilizar las células para otra persona, si así lo requiere. Por esta razón la mayoría de los padres prefiere enviarla fuera de España.

En cualquier caso, lo importante es que vuestra decisión sea libre, bien formada e informada.

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