Muchas veces nos preguntamos cómo debemos coger a nuestro bebé, sobre todo cuando acaba de nacer. Hoy os tramemos unos sencillos consejos, pero lo primero que debes hacer es confiar en tu instinto maternal.
Durante su primer mes de vida, el peque tiene sus músculos del cuello muy débiles, de ahí que debamos sostenerle la cabeza nosotros.
Si quieres levantarle de su cunita tendrás que colocar una mano en su nuca y otra en su culete. Su cabeza deberá descansar en nuestro codo que estará doblado y elevado, reposando el resto de su cuerpo en el antebrazo. Para acostarle sujeta su cabeza y culete con tus manos. Túmbale de lado o boca arriba y comprueba siempre que está perfectamente apoyado sobre su colchón.
Para darle el pecho debes dejar libres sus vías respiratorias. Si lo haces sentada, debes estar cómoda y sostener a tu peque tumbado entre tu codo flexionado y tu antebrazo. Gira su cabecita y su cuerpo hacia tu pecho. Si por el contrario, prefieres darle de comer tumbada, colócate de lado y túmbale en el lado opuesto al tuyo, siempre frente a ti. Y no olvides que si le das el biberón tendrá que estar “semiincorporado” en tu regazo y muy pegado a ti, nunca tumbado, para evitar que se atragante.
La hora del baño suele dar mucho respeto a las mamás, sobre todo a las primerizas, pero tranquila. Introduce al peque en el agua sujetando su nuca y hombros con tu mano, y el culete y sus piernas con la otra. Mójale primero sus piernecitas y luego el resto del cuerpo, siempre sujetando su cabeza.
Si vas a cambiarle el pañal, te aconsejamos hacerlo en un cambiador. Será mucho más cómodo para ambos y también podrás utilizarlo vestirle.
Y por último, si quieres dar un paseo con tu peque en un portabebés, elige un modelo en función de su peso y que mantenga su cabeza bien sujeta. Sus piernas tendrán que estar flexionadas y abiertas, no deben colgar.
Si estás embarazada y quieres conservar las células madre de tu bebé ponte en contacto con nosotros. Nuestro equipo de expertos estará encantado de atenderte.
Deja tu comentario