Un bebé de cuatro meses con un defecto congénito conocido como el síndrome del corazón izquierdo hipoplásico, es decir con la mitad izquierda de su corazón demasiado pequeña o casi inexistente, se somete a un tratamiento con células madre para intentar así reforzar y compensar la parte dañada.

Ante este defecto congénito, los cirujanos tienen que reencausar el flujo sanguíneo, un tratamiento que no siempre tiene éxito. Sin embargo, en el caso del pequeño Josué Salinas Salgado, los expertos optaron por inyectar células madre directamente en la mitad sana de su corazón.

Dicho tratamiento, es uno de los primeros intentos que se lleva a cabo en Estados Unidos para probar si las células madre utilizadas para reparar el músculo cardíaco en pacientes que sobreviven a infartos, también pueden ayudar a los enfermos cardíacos más pequeños.

Como afirma el doctor Sunjay Kaushai, jefe de cardiocirugía pediátrica del Centro Médico de la Universidad de Maryland, quien encabeza el estudio en sociedad con investigadores de la Universidad de Miami, «creemos que el corazón joven tiene mayor capacidad de respuesta».

En un primer momento, Kaushai se inclinó sobre el ventrículo derecho, la parte del corazón del bebé que se encargará de realizar las funciones del lado izquierdo anormal, para luego medir los lugares donde colocar ocho inyecciones de células madre.

“No decimos que lo vamos a curar, lo que busco es la manera de que estos chicos mejoren», explica Kaushai.

El tratamiento empleado hasta la fecha se basa en tres operaciones a corazón abierto realizadas entre el nacimiento y los tres años de edad. Los expertos canalizan la sangre en torno al corazón izquierdo anormal, convirtiendo el ventrículo derecho en la bomba principal.

Según la doctora Kristin Burns, cardiopediatra de los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU., “actualmente, el 65% sobrevive al menos cinco años y muchos llegan a la madurez”. Sin embargo muchos pequeños mueren o requieren un trasplante debido al desgaste del ventrículo derecho. Por este motivo, los médicos se están centrado en investigar si las células madre pueden ayudar al ventrículo a funcionar mejor.

Josué se sometió a este tratamiento tras una segunda operación realizada para aliviar la presión sobre el ventrículo derecho. Este estudio contará con la participación de 30 bebés. La mitad recibirá un inyección de células madre con el fin determinar la seguridad de la técnica y observar si existe alguna diferencia con los que se someterán únicamente a una cirugía.

Aunque hay que esperar varios años para conocer la eficacia del tratamiento, Josué reaccionó con éxito al tratamiento y una semana después pudo volver a su casa.

Actualmente son muchas las enfermedades que pueden tratarse con células madre. Si deseas más información sobre la conservación de células madre ponte en contacto con nuestros expertos.

Contacto Secuvita

 

 

Fuente e información: http://bit.ly/defecto-cardiaco