La displasia broncopulmonar, o también denominada enfermedad pulmonar crónica, es un trastorno pulmonar que afecta a bebés recién nacidos que han hecho un uso prolongado de un respirador al nacer o que nacieron antes de tiempo (prematuros). Esta se caracteriza por el daño en vías respiratorias y por un mayor riesgo de desarrollar hipertensión pulmonar.

Según un reciente estudio, publicado en la revista científica Stem Cells Translational Medicine, los tratamientos con células madre mesenquimales pueden reducir una displasia broncopulmonar que presente complicaciones con una hipertensión pulmonar.

Es decir, los primeros ensayos clínicos muestran que las células madre mesenquimales administradas en bebés prematuros con alto riesgo de displasia broncopulmonar son seguras y eficaces debido a que restauran la estructura alveolar y alivian la hipertensión pulmonar en modelos experimentales.

A su vez, el estudio reconfirma que las células madre mesenquimales son células progenitoras multipotentes con propiedades antiinflamatorias, angiogénicas (proceso biológico que consiste en la formación de vasos sanguíneos nuevos a partir de vasos preexistentes formados durante la etapa temprana del proceso embriológico), antiapoptosis (es decir, evitan la etapa de una muerte celular) y anfibriótica.

Los investigadores administraron una dosis intratraqueal de las vesículas del cordón umbilical a ratas tres días después de su nacimiento y las monitorizaron durante tres meses.

Luego de tres meses, la hipertensión pulmonar inducida persistió en las ratas no tratadas. Por su parte, el tratamiento con la dosis única logró un alivio significativo de los signos de hipertensión pulmonar, preservó el crecimiento de los vasos sanguíneos y mejoró la estructura alveolar.

Fuente:

https://academic.oup.com/stcltm/article/11/8/828/6618502?login=false